Todo lo posible de Lorena Romanin

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Todo lo posible de Lorena Romanin

Y, al final, nos damos cuenta de que absolutamente todo importa.

000189562 Todo lo posibleMaría de los Ángeles Sanz

Luego de Como si pasara un tren, Lorena Romanin nos ofrece su pieza Todo lo posible, donde màs allà de la anècdota y los personajes, hay un fondo temàtico que abarca a las dos historias: las relaciones familiares, y sus espiraladas situaciones cuando la realidad lleva a sus personajes a un lìmite, a un estadio, donde cada uno debe asumir su lugar. Cuatro jòvenes y su manera diferente de ver las cosas, en un mismo momento de sus vidas, sin embargo, cada uno tiene una perspectiva distinta que difiere de la de los demàs, donde todo se mira de acuerdo al lugar que ocupan dentro del entramado de sus relaciones. De esta manera, el artefacto que nos enfrenta al ingresar a la sala es una calesita sin figuras, manual, que ellos mismos mueven, y que es la metàfora exacta de la vida, todo se mueve, cambia, parece y no es, nos deja en un lugar otro, cuando se para de repente. El dispositivo escènico le sirve tambièn a la dramaturga y directora, para interpelar al pùblico, si quiere subirse a su ritmo, lento o ràpido segùn las circunstancias, y desde ahì en movimiento, dentro del circuito o fuera, llevar adelante un clima de complicidad con el espectador. Los personajes estàn bien delineados, y con una muy buena perfomance de parte de los cuatro actores, la pieza comienza cuando el conflicto de uno de ellos, el maestro de un jardìn infantes plantea una problemàtica, que lo atañe, y que defiende contra viento y marea, a pesar de saber que le ocasionara su salida del trabajo, la libertad de ser quien uno quiere ser desde la niñez, desde el educador el respeto al educando en su comportamiento personal y sus elecciones, algo que todavìa requiere una aceptaciòn que las ùltimas disposiciones parecen querer atropellar. Las relaciones filiales, las de pareja, la mirada de la amistad entre pares, que a veces disfrazamos de amor o viceversa, y una realidad cambiante, que muta, y nos obliga a seguir sus pasos tratando de adaptarnos a lo posible, a lo que podemos hacer, es la tònica de la puesta. Con un manejo inteligente del humor negro, negrìsimo por momentos, la dramaturgia nos lleva a reir, y entretenernos con el desarrollo de la intriga, mientras la mùsica nos da un alivio, entre lo real concreto y el deseo que circula entre los personajes sin tregua. Deseo y necesidad de compañìa, una bùsqueda de mirarnos a la cara, en vez de comunicarnos con emoticones, proxemia que la propuesta nos ofrece en la cercanìa fìsica de los personajes entre sì, y en la bùsqueda de la mirada còmplice con el pùblico. Una puesta con recursos simples pero de buena factura que logra interesar al espectador, e involucrarlo no sòlo en la temàtica de relaciones que propone sino en la necesidad de tomar distancia de lo que nos impide ser màs francos, màs cercanos a los sentimientos.

Ficha tècnica: Todo lo posible de Lorena Romanin. Elenco: Marco Gianoli, Salomè Boustani, Claudio Mattos, Guido Botto Fiora. Diseño de dispositivo escenogràfico: Isabel Gual, Facundo Guerreschi. Realizaciòn de dispositivo escenogràfico: Facundo Guerreschi. Vestuario: Lorena Romanìn. Diseño de luces: Diego Becker. Diseño gràfico: Mariana Rovito. Prensa y difusiòn; Carolina Alfonso. Asistencia de direcciòn: Jimena Morrone. Direcciòn: Lorena Romanin. El Camarìn de las musas. Duraciòn: 70 minutos.

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