Chajá de Luis Cano
La escritura de Cano es una escritura poderosa, crea evocaciones, transciende lo situacional. Provoca, expande sentido. (Santiago Loza)1
Azucena Ester Joffe
Ya desde su título, como aglutinador sémico, Chajá -esa ave robusta que suele vivir en pareja, de comportamiento gregario- nos propone una realidad atravesada por la subjetividad femenina. Una historia que podría parecer simple: un verano y una necesaria despedida, una decisión dolorosa para poder “volar”. Sin embargo la particular poética de Luis Cano, como ya nos tiene acostumbrados, nos involucra desde el inicio con su textualidad que, de manera fragmentada, recupera, a través de la memoria, y afirma esa subjetividad.
Laura López Moyano y Marcelo Mininno le otorgan la perfecta carnadura a los personajes, Claudia y Alejandro, ellos son parte de ese hábitat natural cercano a algún río o laguna de un pueblo pequeño, entorno que, a su vez, los une y los distancia. La adolescente, al sufrir una afección en los ojos, sólo puede ver a través de la mirada de ese otro, de sus comentarios y de sus descripciones -por ejemplo, cuando ella le pide ir al cine y él le relata la película. Mientras Alejandro sueña con vender keronsene cuando sea más grande, Claudia está segura que su sueño no está ahí. Ver sin ver. La protagonista, rompiendo la cuarta pared y en el presente de la fábula, va dando algunos detalles de ese amor juvenil, en tanto, él sigue en ese pasado que lo adormeció para siempre. Claudia, adolescente, lo ama y lo ve más allá de su dificultad momentánea, y en su hoy, adulta, necesita volver a esos recuerdos, quizá no tan felices pero que le permitieron soñar con otro lugar. Alejandro es más agreste, anclado en la tierra, y parece no verla, nunca sabremos si él la ama. Amar en soledad y un encuentro que parece imposible. Ambos son seres tiernos, queribles, espontáneos en una relación sentida pero que es distinta para cada uno. Los saltos temporales le otorgan un sólido ritmo interno y Laura López Moyano los transita de manera impecable porque el relato se fragmenta a partir de su discurso, verbal y corporal. A partir de los diferentes trazos que le otorga a su criatura nos lleva por un recorrido sinuoso y lúcido, con una intensidad visual que da cuenta de esas huellas, de esas “capas”.
El humor inteligente, con algo de melancolía, resalta de forma dinámica cada escena y nos sumerge sin dificultad en la ficción. En el espacio lúdico recortado por la precisa escenografía de líneas firmes -juncos y cañas- con pocos elementos construye ese posible sitio donde podrían convivir y poner los huevos la pareja de chajá. Junto a la acertada iluminación que va destacando los diferentes momentos, la alternancia entre el ayer y el presente. Por último, la música incidental y los sonidos del “ambiente” terminan por cerrar un hecho teatral donde encastran perfectamente todos los sistemas significantes pero no en un sentido unívoco sino que “provoca” y “expande sentido”.
Chajá es un potente texto escénico que se repondrá dentro del marco del FIBA, del 23/01 al 03/02/2019, y luego hará una próxima temporada, en principio, hasta mediados de marzo.
Ficha técnica: Chajá de Luis Cano. Actúan: Laura López Moyano (Claudia) y Marcelo Mininno (Alejandro). Diseño de Iluminación: Ricardo Sica. Diseño y realización de escenografía y vestuario: Laura Poletti. Realización de vestuario: Cintia Ledesma. Asesoramiento físico: Marina Otero. Dirección de voces y capturas de audio: Tian Brass. Diseño sonoro: Luis Cano. Banda sonora: Tian Brass, Luis Cano. Tratamientos sonoros: Alejandro Dramis e Irene Dogmática. Edición: Luis Cano, Meel Arcuri y Tian Brass (Samples de Dmitri Shostakovich, Los Iracundos, Los Paraguayos, Mario Álvarez Quiroga, Richard Wagner, Roberto Carlos y Twiggy). Gestión y financiamiento ejecutivo: Larisa Rivarola. Producción ejecutiva: Meel Arcuri y Disperso. Fotografía: Pablo Morgavi. Piezas gráficas: Laura Rovito. Community manager: Correydile Prensa. Operación técnica: Lisa Iris Benevet. Asistencia de escenas y operación de sonido: Maia Postolski. Asistencia de dirección: Meel Arcuri. Dirección general: Luis Cano. Estreno: 07/11/2018. En El Portón de Sanchez. Duración: 50’.
1Losa, Santiago, 2017. “Cano. La escritura encendida” en Yo estuve ahí. Textos dramáticos de Luis Cano. CABA: Inteatro: pág 191.